Ganarse respeto alumnos

10 Nov Ganarse el respeto de tus alumnos es fácil si sabes cómo

Recuerda estas 5 claves para ganarte el respeto de tus alumnos y posiblemente tus aulas empiecen a cambiar mucho más de lo que imaginas:

1. TÚ NO ERES NI MÁS NI MENOS QUE ELLOS

Al trabajar con distintos colegas de profesión me he dado cuenta de que en algunas situaciones se sienten más o menos que sus alumnos:

– No eres más que ellos: A veces, por el simple hecho de poseer conocimientos o años de experiencia pueden considerar que son superiores a sus alumnos, que tienen más razón o incluso que sus ideas son más apropiadas en cualquier situación que se da en un aula. Pero mi experiencia me dice que en muchas situaciones nuestros alumnos pueden poseer más conocimientos que nosotros respecto a muchos temas incluso nos pueden enseñar de la propia materia en la que nosotros somos especialistas. Hoy en día la mayor parte del conocimiento está a un solo click y puede que ellos nos superen en clicks.

– Tampoco eres menos que ellos: En el mundo de las empresas es muy fácil que un formador pueda sentirse menos que los directivos que se posicionan con mucha facilidad. Sentirse inferior a ellos no es un buen punto de partida porque llegarás a presionarte tanto a ti mismo que no darás lo mejor de ti. Desde que empecé en el mundo empresarial, con tan solo 22 años, me recordaba en cada una de esas situaciones complicadas que esos grandes directivos no eran ni más ni menos que yo, sabrían más del mundo empresarial o de estrategia, al igual que yo sabía más de cómo funcionan las personas, pero no eran ni más ni menos. Esta mirada directa, de tú a tú, con humildad pero con seguridad me ha hecho ganarme el respecto profesional de muchos de ellos.

2. RESPETARTE A TI MISMO

¿Cómo quieres que ellos aprendan a valorarse y respetarse si tú eres el primero que no lo hace consigo mismo? Si eres de los que tiran la toalla a la primera, creo que te equivocaste de profesión. Aquellos alumnos, niños, jóvenes o adultos que invierten parte de su tiempo en nuestras clases, se merecen un ejemplo de lucha, de perseverancia, de intentos fallidos y acertados.

No te resultará muy útil infravalorarte o enviarte mensajes derrotistas o victimistas delante de ellos. Cuando ellos nos miran, no ven solo un libro de conocimientos en nosotros, sino que ven un ejemplo de vida del que se puede aprender muchísimo. Esto no quiere decir que no muestres tu vulnerabilidad, por supuesto que no. Ante ellos puedes reconocer tus fallos, tus miedos, tus errores pero siempre con esa actitud de que la vida continúa siempre hacia delante.

3. CUIDA LOS DETALLES

Muchas veces no damos la importancia que merecen los detalles en nuestra vida y justo en el contexto de formación y educación pueden marcar la diferencia. Desde mi punto de vista hay cientos de detalles que puedes cuidar para transmitirles que ellos y su tiempo es de lo más importante que te ha ocurrido ese día. Te listo algunos de esos detalles que puedes tener en cuenta:

– Pequeñas sorpresas que les cambien el día: señálate sus cumpleaños, sus citas especiales o eventos que les preocupan y muéstrales de algún modo que tu memoria (o tu agenda) se encargó de recordarte ese momento especial.

– La preparación de una clase, los materiales, los recursos que utilizas o tu propia metodología puede estar llena de detalles que les recuerde que hiciste un esfuerzo por preparar minuciosamente tu clase.

– Cuida tu imagen personal, tu forma de vestir y todos aquellos detalles que te caracterizan como docente. Consigue detalles que de alguna manera te distingan y marquen la diferencia.

4. CUMPLIR CON TU PALABRA

No seas un SINPA, por favor. Una de las cosas que más les puede doler a esos seres humanos que han confiado en ti es que no cumplas aquello que llegaste a acordar con ellos. Da lo mismo si es una fecha de entrega, si es una presentación de algo, da lo mismo si es que le dijiste que traerías o te encargarías de cualquier cosa, sea lo que sea, cumple tu palabra.

A mi no me importa si una noche tienes que estar en vela trabajando en lo prometido, no me importa si eso en un momento determinado te sobrecarga, me da igual y a ellos todavía más. Recuerda que para ganarte su confianza pueden pasar semanas en cambio, en un solo segundo la puedes perder.

5. AGRADECELES LOS APRENDIZAJES

Como te decía al principio, una de nuestras bases más potentes de aprendizaje son nuestros propios alumnos, sus conocimientos, sus experiencias, lo que han vivido hasta el momento, sus valores. Y este punto hay que reconocérselo continuamente. Ten preparado siempre un “muchas gracias, acabo de aprender esto de ti” porque justamente es lo que les inspirará a continuar aportando y aprendiendo a la vez de ti. Justo por este motivo, desde que empecé a trabajar en las aulas me dirijo a los alumnos como “mis alumnos y alumnas y a la vez mis maestros y maestras”.

¡Gracias por lo que me habéis hecho aprender en estos años!

 


 

Reme Egea_Formación para docentes

Reme Egea

Maestra de Educación Física, Formadora en Habilidades Directivas y Gestión de Equipos, Psicóloga, Creadora del proyecto Train The Trainers, Conferenciante, consultora y socia de Proformación S.L.

Reme es una de esas atrevidas aventureras, de las que luchan por los sueños, una de esas apasionadas que nunca tira la toalla.

1Comment
  • Beatriz López Rico
    Posted at 13:41h, 22 agosto Responder

    Cuando dejemos de aprender…será el día que moriremos en vida.

Post A Comment